Por Adriana Guzmán
Como les prometí aquí la segunda entrega de la serie de historias de canciones que todos cantamos pero que no conocemos su significado real.
Hoy toca el turno a “American Pie”, de Don McLean una canción que escuche por primera vez en la voz de Madonna en el 2000, una versión realizada como parte del soundtrack de la película The Next Best Thing. La grabación fue co-producida por Madonna y William Orbit. La versión es más corta que la original con influencias de la música dance. Y que sin duda ha sido una de mis favoritas de todos los tiempos.
Pero más allá de que sólo me guste a mi esta versión, también despertó mi interés por conocer qué motivó a Don McLean a escribir el tema que ha sido considerado por la Asociación de la Industria Discográfica de Estados Unidos como la “canción del siglo”.
Y con la ayuda de un tumba burros musical y la memoria de mis padres – mi mamá una mujer que nos ponía a mis hermanas y mí a bailar con la música de los Beatles sobre el sillón de niñas y mi padre un ex baterista que solía tener el pelo largo- pues aquí les dejo en resumen la historia de esta emblemática canción.
EL DÍA QUE LA MÚSICA MURIÓ
Según McLean, nacido en 1945, esta canción, que ha sido objeto de múltiples debates sobre el significado de su letra y que además dio nombre a su segundo álbum, es “parte de un proceso de despertar, un viaje místico hacia el pasado”, dijo el músico en 2015.
Compuso el tema en Pensilvania y en Cold Springs (estado de Nueva York) y fue grabado en mayo de 1971, aunque no se escuchó por primera vez hasta octubre de ese año.
American Pie narra una etapa clave para el desarrollo de la humanidad; la década de los 60, es una canción llena metáforas, acertijos y referencias a la cultura popular disfrazadas de poesía.
La relevancia de esta obra como mencioné la llevó a ser llamada la “canción siglo”. Y no es para menos, pues en sus letras aborda la evolución del rock, algunos de los sucesos políticos más trascendentes, así como los cambios sociales que experimentó el mundo antes, durante y después de la década de los 60.
El músico tuvo la genialidad lírica de hablar sobre personajes como The Beatles, The Rolling Stones, Bob Dylan, Janis Joplin, Buddy Holly, Elvis Presley, Charles Manson, John F. Kennedy y Martin Luther King, pero sin mencionar en ningún momento el nombre de estas icónicas figuras sino más bien descritas con metáforas.
Debido a que no mencionó a ninguno de estos personajes, la canción se convirtió en objeto de interpretaciones las cuales fueron alimentadas por la reticencia de McLean de hablar sobre el verdadero significado de su obra.
Sin embargo, muchas de esas hipótesis e interpretaciones hallaron una respuesta el 7 en abril de 2015, cuando el manuscrito original de la canción, el cual contenía anotaciones del puño y letra de McLean, fue subastado en 1.2 millones de dólares por la casa Christie’s en Nueva York, sumándose así a la lista de famosas canciones que rentabilizan sus manuscritos en el mundo de las subastas, como “Like a Rolling Stone”, de Bob Dylan, que se vendió por 2 millones de dólares un año antes. Veamos la letra original.
“A long long time ago, I can still remember how That music used to make me smile, and I knew if I had my chance, that I could make those people dance and maybe they’d be happy for a while. But February made me shiver with every paper I’d deliver”.
El joven McLean, quien para 1959 era un repartidor de periódicos en bicicleta, se enteró la mañana del 4 de febrero que la anoche anterior habían muerto en un accidente aéreo los pioneros del rock y sus ídolos, Buddy Holly, Ritchie Valens y The Big Bopper.
El artista bautizo aquel acontecimiento como “el día que la músico murió”, pues marcó el fin de los años 50 y la etapa del rock clásico, alegre, bailable y despreocupado.
“Something touched me deep inside, the day the music died So bye, bye Miss American Pie, drove my Chevy to the levee but the levee was dry and them good ole boys were drinking whiskey and rye, singin’ this’ll be the day that I die”.
El pay de manzana como los autos de la marcha Chevrolet son símbolos de la cultura estadounidense, por lo que estas palabras hacen referencia a la pérdida de la inocencia de toda una generación que durante la década de los 60 experimentaría cambios radicales.
“And moss grows fat on a rollin’ Stone, but that’s not how it used to be when the jester sang for the king and queen, in a coat he borrowed from james dean and a voice that came from you and me”, continua McLean.
Esta es una referencia a el ahora premio Nobel de Literatura Bob Dylan, quien cambió su guitarra acústica por una eléctrica, al tiempo que se convirtió en la voz de su generación quien en su segundo álbum apareció con una chaqueta similar a la de James Dean y compuso Like a Rolling Stone.
“Oh, and while the king was looking down, the jester stole his thorny Crown” es decir, el cantante ocupó el lugar que alguna vez tuvo Elvis Presley, quien en la década de los 60 se volvió conservador, gordo y lento.
“The courtroom was adjourned, no verdict was returned, and while Lennon read a book of Marx, the quartet practiced in the park, and we sang dirges in the dark, the day the music died”
La estrofa ha sido interpretada como una referencia al asesinato de Kennedy, pues nunca se pudo dictar un veredicto contra su ejecutor, Lee Harvey Oswald; quien a su vez fue muerto a tiros frente a la mirada del mundo, poco después de haberse declarado un chivo expiatorio.
En cuanto a “cuando Lennon read a book of Marx -Lennon leyó a Marx” podría indicar la transformación del cuarteto de Liverpool, el cual abandonó las letras y los ritmos simples para inmiscuirse con sus letras en temas políticos.
“Helter skelter in a summer swelter, the birds flew off with a fallout shelter, eight miles high and falling fast, it landed foul on the grass”.
La canción es una alusión a los asesinatos orquestados por Charles Manson. En agosto de 1969, miembros de la familia Manson allanaron la residencia del matrimonio LaBianca en Los Ángeles. Al terminar de matar brutalmente a la pareja, los asesinos escribieron con la sangre de las víctimas “Healter Skelter”, el nombre de una popular canción The Beatles.
“Now the half-time air was sweet perfume, while the sergeants played a marching tune, we all got up to dance, Oh, but we never got the chance! Cause the players tried to take the field the marching band refused to yield do you recall what was revealed the day the music died?”
McLean continúa con referencias a The Beatles, a quienes llama sargentos por el álbum Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band publicado en 1968. En esta misma estrofa, el artista habla de la separación de la banda, la cual coincide con el final de la década de los 60.
Respecto al dulce perfume, la referencia parece apuntar al consumo de marihuana. Sobre la parte que habla de los jugadores que toman el campo y no permiten a los jóvenes bailar, se ha interpretado como la represión policiaca hacia la juventud rebelde.
“Oh, and there we were all in one place a generation lost in space, with no time left to start again. So come on: Jack be nimble, Jack be quick!, Jack flash sat on a candlestick, cause fire is the devil’s only friend”.
La referencia no es del todo clara, pero al parecer McLean alude al festival de Woodstock con la frase “estábamos todos en un lugar”. Mientras que la generación perdida en el espacio podría ser otra referencia a las drogas, quizá al Space Oddity de David Bowie o la llegada a la Luna.
Es entonces que comienzan las alusiones a The Rolling Stones, quienes en ese entonces tenían éxitos como Jumpin’ Jack Flash y Sympathy for the Devil. McLean hace una descripción del trágico concierto Altamont Speedway Free Festival; descrito como el día más oscuro en la historia del rock.
“Oh, and as I watched him on the stage, my hands were clenched in fists of rage, no angel born in hell, could break that satan’s spell and as the flames climbed high into the night to light the sacrificial rite, I saw satan laughing with delight, he day the music died”.
Para aquel concierto, The Rolling Stones contrató a la pandilla de motociclistas Hells Angels para resguardar el escenario, sin embargo, terminaron apuñalando a un joven afroamericano, quien tenía un arma, todo esto mientras sus satánicas majestades daban el show.
“I met a girl who sang the blues, and I asked her for some happy news, but she just smiled and turned away. I went down to the sacred store, where I’d heard the music years before, but the man there said the music wouldn’t play”.
Los turbulentos 60 habían terminado y los 70 no comenzaron muy bien que digamos; pues el 4 de octubre de 1970 murió Janis Joplin, “la chica que cantaba blues”, un mes después se fue Jimmy Hendrix y el año siguiente fue turno de Jim Morrison. “La música no tocaría más”.
And in the streets: The children screamed, the lovers cried, and the poets dreamed, but not a word was spoken, the church bells all were broken…”
La sociedad estadounidense estaba dividida por la Guerra de Vietnam, muchos de sus ídolos y guías morales ya no estaban. El tema de la Guerra Fría y la amenaza de una guerra nuclear se volvían cada vez más fuerte; en pocas palabras, la década los 70 no pintaba nada bien.
“… and the three men I admire most, the father, son, and the holy ghost, they caught the last train for the coast, The day the music died”.
En cuanto a esta línea con tinte bíblico, McLean puede referirse a la muerte de Holly, Valens y Bopper; sin embargo, también ha sido interpretada como una alusión a los asesinatos de John F. Kennedy, Martin Luther King y Robert F. Kennedy; tres símbolos que se fueron durante los 60.
En conclusión estas son sólo unas cuantas referencias que contiene American Pie; algunas resultan bastante claras y otras son simplemente imposibles de descifrar, aún con el manuscrito original que tiene 16 páginas, con 237 líneas escritas a mano y 26 mecanografiadas.
Esto se debe a que McLean combinó momentos importantes de la música y la política con sus propias experiencias; primero como niño ilusionado con el rock clásico, luego como adolescente solitario y finalmente como un adulto poco optimista viviendo los 70. McLean, muestra el proceso de transformación de una generación ilusionada que poco a poco pierde la inocencia y cae en cuenta que el mundo puede ser muy duro allá afuera.
Aquí la versión original, juzga tu mismo.
“Bye, bye, Miss American Pie”
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